El Real Madrid tiene dudas sobre qué hacer tras la salida de Luka Jovic al Eintracht de Frankfurt. Tal y como desveló OKDIARIO, el delantero serbio se reunió antes de final de año con José Ángel Sánchez, director general, para transmitirle su deseo de salir del club blanco, donde no se ha sentido en ningún momento cómodo. Tanto la entidad como Zidane, su gran valedor, lo vieron como un acierto, ya que regresar al club donde despuntó3 hace tres temporadas le podría ayudar a recuperar una confianza perdida en la casa blanca. Finalmente, el deseo del jugador se ha cumplido y ya es oficial que vuelve a jugar en calidad de cedido hasta final de temporada en Alemania.
La gran incógnita que tiene ahora el Real Madrid es fichar o no fichar en este mercado de invierno. Los blancos tenían claro que no iban a moverse en el mes de enero en busca de algún refuerzo, pero la marcha de Jovic, sumada a la lesión de Rodrygo, que todavía estará dos meses en el dique seco, hacen que los blancos se estén replanteando muy seriamente esta situación.
El Real Madrid tiene miedo a que la lesión de cualquier delantero, la de Benzema sería dramática, deje muy tocado el frente ofensivo de la plantilla que lidera Zinedine Zidane, por ello en estos momentos no descartan nada, aunque tienen claro que no harán ninguna locura. La entidad presidida por Florentino Pérez sigue velando más por la economía que por las inversiones en unos tiempos tremendamente complicados. Desde el club trasladan que sólo se lanzarían a por un refuerzo si aparece “un nuevo Chicharito”. Y con todo esto, encima de la mesa el nombre de Memphis Depay.
Depay como opción
El delantero de 26 años acaba contrato el próximo 30 de junio con el Olympique de Lyon y salvo sorpresa mayúscula saldrá en busca de un equipo que dé un impulso más a su carrera. Por lo tanto, en el mercado de invierno su precio sería más que asumible. El Real Madrid juega a su favor con las buenas relaciones que mantiene con la entidad gala. Florentino Pérez y Jean-Michel Aulas, máximo mandatario de los franceses, tienen una excelente amistad, lo que podría facilitar unas negociaciones que por otro lado tienen sus dificultades.
El Lyon es líder de la Ligue 1 y sus opciones de hacerse con el título pasan por seguir contando con Depay, a pesar de que asumen el riesgo de una marcha a coste cero a final de temporada. El atacante holandés suma 11 dianas en el campeonato francés, una menos que Mbappé, y está siendo capital para la buena dinámica de un equipo que está centrado en la liga ya que no juega competiciones europeas. Además, hay que recordar que ya han dejado salir a Moussa Dembélé al Atlético de Madrid, por lo que otra venta ofensiva dejaría muy tocado al equipo dirigido por Rudi García.
Con todo esto sobre la mesa, el Real Madrid tiene serias dudas. Por un lado sabe de que las negociaciones con el Lyon serían sencillas, aunque también son conscientes de que penalizarían notablemente a un club amigo pagando por un futbolista que en verano podría llegar gratis. Los blancos tienen tres semanas para decidirse, aunque los técnicos blancos saben que esta es la mejor opción que hay en el mercado. Buena, bonita y barata.
El Lyon prefiere al Madrid
Depay es uno de los mejores delanteros del momento. El atacante puede jugar arriba, aunque no tiene problemas para retrasar su posición a la mediapunta e, incluso, caer a banda. Y es que no sólo tiene mucho gol, también una enorme capacidad para asociarse con sus compañeros. Este curso ya ha repartido cinco asistencias. Por lo tanto, llegue o no en el mercado de invierno, el Real Madrid le sigue teniendo en agenda y el Lyon prefiere que vaya a los blancos por una cuestión de amistad.
El verano pasado, cuando parecía que su llegada al Barcelona era inminente, ya se lo ofreció al Real Madrid en una clara maniobra de encarecer un fichaje que al final no se concretó. Los azulgranas siguen detrás del jugador, pero el club de origen, que ya poco puede hacer porque desde el 1 de enero el delantero es libre de negociar con quién quiera, tratará de hacer fuerza para que vista de blanco si estos finalmente dan el paso de asumir la operación. Sin duda, su llegada al Santiago Bernabéu no sólo permitiría a los de Zidane hacerse con un gran delantero a coste bajo o cero, sino que también darían un golpe al Barcelona.